Güímar, a 14 de diciembre de 2025.- A pesar de las inclemencias meteorológicas que afectaron a la isla este domingo, el Mercadillo del Agricultor de Güímar mantuvo su cita semanal con la misma dedicación de siempre, aunque con menos afluencia de público y puestos que en jornadas normales.
Desde primeras horas de la mañana, los agricultores locales desplegaron sus productos de «kilómetro cero» con el entusiasmo característico que los define, demostrando que ni la lluvia puede apagar su compromiso con la venta directa y la calidad de sus cosechas.
El mal tiempo redujo considerablemente el ambiente festivo que normalmente caracteriza este mercado dominical. Los puestos disminuyeron en número y los pasillos, generalmente abarrotados de vecinos y visitantes, presentaban un ritmo más tranquilo. Sin embargo, quienes se acercaron pudieron disfrutar de la frescura y calidad de los productos directamente del campo a la mesa.
«Es una pena el tiempo, pero aquí estamos, como cada domingo», comentaba uno de los agricultores mientras organizaba sus hortalizas. «La gente que ha venido valora mucho el esfuerzo».
La novedad de esta jornada fue la exposición y venta de artesanía local bajo la denominación GüimarArte, que reunió a creadores del municipio mostrando trabajos manuales que van desde la cerámica y cestería hasta textiles y obras en madera.
Esta iniciativa buscaba diversificar la oferta del mercadillo y apoyar a los artesanos locales, ofreciendo a los visitantes la posibilidad de adquirir productos únicos y con sello güimero. Los puestos artesanales añadieron un colorido especial a la jornada, atrayendo a quienes buscaban algo más allá de los productos agrícolas.
El Mercadillo del Agricultor de Güímar se ha consolidado como referente de la venta directa y el consumo responsable en el Valle de Güímar. Los productos «kilómetro cero» no solo garantizan frescura, sino que reducen la huella de carbono y fortalecen la economía circular del municipio.
Entre la oferta habitual destacan papas, frutas tropicales, hortalizas de temporada, plantas, quesos locales y otros productos típicos de la tierra, todos cultivados o elaborados en las inmediaciones.
Más allá de su función comercial, el mercadillo representa un punto de encuentro social donde vecinos, agricultores y visitantes intercambian no solo productos, sino también conversaciones, recetas y el saber hacer del campo canario.
Los organizadores confían en que las próximas jornadas recuperen el esplendor habitual con la mejora del tiempo, e invitan a la población a seguir apoyando esta iniciativa que mantiene vivas las tradiciones agrícolas y artesanales del municipio.
El Mercadillo del Agricultor de Güímar continúa su actividad cada domingo, demostrando que ni la lluvia puede extinguir la llama del campo y la artesanía local.
