LAS OBRAS SIN FIN DE LA AVENIDA DE LOS MENCEYES, SIGUEN TORTURANDO A LOS VECINOS.

Candelaria a 12 de febrero de 2025. La Avenida de los Menceyes, una de las principales vías de Candelaria, se ha convertido en un símbolo de la desorganización y los retrasos en las obras de saneamiento que el Ayuntamiento lleva meses ejecutando. Lo que comenzó como un proyecto prometedor para mejorar la infraestructura de la zona se ha transformado en un verdadero «campo minado» para los vecinos, quienes día a día enfrentan pérdidas de aparcamiento, cambios en el sentido del tráfico y un sinfín de inconvenientes que afectan su calidad de vida.
Un proyecto con buenas intenciones, pero mal ejecutado
Las obras de saneamiento en la Avenida de los Menceyes forman parte de un plan más amplio que incluye la construcción de una nueva red de saneamiento, una estación de bombeo (EBAR) y un colector en la Avenida Marítima. Con un presupuesto de más de 837.000 euros y un plazo inicial de ejecución de 10 meses, el proyecto prometía mejorar la infraestructura de la zona y conectar los caudales de aguas negras a la red de saneamiento existente. Sin embargo, lo que parecía una solución se ha convertido en un problema crónico.
Retrasos y molestias interminables
A pesar de que las obras comenzaron con la promesa de ser ejecutadas con celeridad, los retrasos se han acumulado. Los vecinos han visto cómo los plazos se alargan y las molestias se multiplican. La calle Batayola, una de las principales afectadas, ha sido escenario de constantes cambios en el sentido del tráfico y restricciones de aparcamiento, lo que ha generado un caos circulatorio en la zona14. Además, la conexión entre la Avenida de los Menceyes y la Avenida Marítima ha sufrido modificaciones imprevistas, complicando aún más la movilidad en la zona6.
Impacto en la vida diaria
Los residentes de la zona han expresado su frustración por la falta de información y la poca transparencia en la gestión de las obras. «Cada día es una aventura», comentan algunos vecinos, refiriéndose a los constantes cambios en el tráfico y las dificultades para encontrar aparcamiento. Además, la falta de señalización adecuada y la ausencia de carteles informativos han agravado la situación, dejando a los ciudadanos en la incertidumbre sobre cuándo finalizarán las obras12.
Un llamado a la acción
Ante esta situación, es urgente que el Ayuntamiento de Candelaria tome medidas para agilizar las obras y minimizar el impacto en la vida diaria de los vecinos. La transparencia y la comunicación con los ciudadanos deben ser prioritarias, así como la implementación de soluciones temporales que alivien las molestias causadas por las obras. Los vecinos merecen saber cuándo podrán recuperar la normalidad en su día a día.
En conclusión, las obras de saneamiento en la Avenida de los Menceyes, aunque necesarias, se han convertido en un ejemplo de mala gestión y falta de planificación. Es hora de que el Ayuntamiento asuma su responsabilidad y actúe para devolver a los vecinos la tranquilidad y el orden que merecen.